¿Puedo viajar con mi dron?
Llegó el verano, y con él, para muchos, los viajes o desplazamientos. Pero a los aficionados a los drones, eso nos plantea una importante pregunta: ¿qué tengo que hacer para viajar con mi dron?
Llegó el verano, y con él, para muchos, los viajes o desplazamientos. Pero a los aficionados a los drones, eso nos plantea una importante pregunta: ¿qué tengo que hacer para viajar con mi dron?
Nos desplacemos por tierra o por aire, el principal problema de llevar contigo un dron es el mismo: las baterías de litio de los dispositivos. Pero las precauciones a tomar no serán exactamente las mismas.
Si viajamos por tierra
Si nos movemos en tren, coche o autocar, no tendremos más que seguir lo que dicta el sentido común para proteger las baterías de posibles golpes, y lo más importante, de las altas temperaturas, para evitar un posible incendio de las mismas. De sentido común sería también transportar todos los accesorios (hélices, cámara, controlador de vuelo, etc.) en una misma maleta o mochila que esté especialmente preparada para ello. Por ejemplo, una como esta:
Eso evitará posibles extravíos, y los moldes de espuma protegerán los accesorios de golpes y frenazos inesperados.
Si viajamos por aire
Si hemos de tomar un avión, el tema se complica. Es posible viajar en avión con un dron, siempre y cuando cumplamos ciertas exigencias, y sigamos las normativas existentes, tanto las internacionales como las propias de cada compañía aérea.
En primer lugar, lo más habitual es que, por seguridad, las baterías de litio tengan que viajar en la cabina como equipaje de mano, y no en la bodega del avión con el equipaje facturado.
En segundo lugar, dependiendo de la potencia/hora (W/h) de las baterías, se pueden dar tres casos ligeramente diferentes.
- Baterías pequeñas (hasta 100 vatios/hora): es decir, las de los mp3, ordenadores portátiles, etc. No hay problema en volar con ellas si van instaladas dentro del dispositivo, o si llevamos otras de repuesto, en el equipaje de mano en todos los casos, y facturado en algunas compañías aéreas. En este caso, es aconsejable revisar la normativa concreta de la compañía áerea.
- Baterías medianas (entre 100 y 160 vatios/hora): por ejemplo, las de los ordenadores portátiles más potentes, o de los equipos fotográficos y audiovisuales profesionales. El caso es idéntico al de las baterías pequeñas, con la única diferencia de que existe un límite de dos baterías de repuesto si van en el equipaje de mano… y la prohibición de facturar baterías de repuesto en cualquier caso. Una vez más, la aprobación definitiva dependerá de la compañía, por lo que lo más prudente siempre será ponerse en contacto con ella antes de llegar al aeropuerto con el dron bajo el brazo.
- Por último, las baterías grandes ( de más de 160 vatios/hora) deberán ser presentadas y transportadas como cargo siguiendo la normativa IATA de mercancías peligrosas.
Además, en los tres casos, los dispositivos siempre deberán ir apagados, y los terminales de conexión de baterías aislados para evitar posibles cortocircuitos.
Si seguimos estas normas, podremos transportar sin mayor problema nuestro dron dentro de un avión.
¡Feliz vuelo!